Ya sabes a qué me refiero… Tú también has sufrido esa sensación de vacío interior.
Lo normal es que, de forma inconsciente, intentes llenarlo con:
- Ropa
- Nuevo iPhone
- Relaciones
- …
Te das cuenta de que no te daban lo que querías, que es sentirte mejor.
Te pones a ver series en Netflix, incluso a plantearte vivir más experiencias como hacer ese viaje a Tailandia.
Eso te hace sentirte algo mejor, aunque tú sigues con ese malestar, ese… “me falta algo».
Exploras el yoga y la meditación porque te pica la curiosidad, y notas que empiezas a conectar con algo más íntimo.
Te abres y te interesas por otras prácticas y herramientas. Empiezas a ver que ya no eres tan escéptico como antes.
De todas formas, te das cuenta de que el vacío sigue asomando la cabeza de vez en cuando.
Y tú te preguntas: “¿cuándo me dejará en paz esa maldita sensación?”
No te preocupes, nos pasa a todos.
Antes de seguir quiero decirte que si para ti el concepto de «espiritualidad» es lo mismo que «religión» o «new age», si quieres puedes dejar de leerme porque no me interesa convencerte de nada.
Para mí el concepto no es dogmático, sino inclusivo.
Necesitas sentir el vacío
Créeme, sé de lo que hablo.
En mi caso la sensación de vacío interior estuvo presente desde la adolescencia hasta hace bien poco.
Es decir, que durante casi toda mi vida siempre busqué algo que me llenara de forma inconsciente:
- Ropa cara
- Deporte
- Amistades
- Pareja
- Viajes en solitario
- Este blog
- Espiritualidad
Sí, también la espiritualidad.
Siempre he sido escéptico con esos temas, pero a los 19 años, empecé a interesarme un poco por lo trascendental.
El caso es que entre los 14 y los 21 hice atletismo, y con 17 ya había asistido a varios campeonatos de España.
Prometía, pero antes de cumplir los 18 las lesiones se toparon en mi camino.
Estuve dos años en el dique seco, hasta que ya desesperado leí un libro sobre chamanismo.
Apliqué las pautas que mencionaba y, de forma casi milagrosa, me recuperé de una lesión que parecía irreversible, clasificándome de nuevo para unos campeonatos de España más de 2 años después, con 20 años.
No entraré en detalles, pero practicando alguna técnica vi cosas raras y me asusté. Así que, como yo no creía mucho en eso, aparqué el asunto del chamanismo y todo lo relacionado con la new age.
Hasta los 25, cuando atravesé una depresión, no empezaría a interesarme de verdad por la espiritualidad.
Poco a poco fui dándome cuenta de que, como los antidepresivos, la espiritualidad puede ser también un parche si se usa de forma inadecuada.
En otras palabras: puede convertirse una forma de evasión, una huida e incluso una adicción.
La espiritualidad puede convertirse una forma de evasión, una huida e incluso una adicción. Clic para tuitearTambién hay efectos colaterales, como el dolor de sentirse especial o el aislamiento social.
Puedes empezar a criticar al sistema a diestro y siniestro, incluso a tus amigos por ser unos «inconscientes».
También puedes volverte un hippie y querer salirte del sistema.
Créeme, no puedes salir del sistema porque formas parte de él.
Sin darme cuenta, hace un tiempo empecé a comportarme de forma dogmática con familia y amistades, intentando convencerles de mi punto de vista sobre algunos temas.
Me sentía diferente y especial, por lo que tendía a aislarme y buscar personas que pensaran como yo.
A las que no lo hacían intentaba «convertirlas», para que fueran más conscientes.
Era parte del proceso, y por suerte poco a poco me di cuenta de que para ser feliz no todo el mundo tenía que pensar igual que yo.
Al principio todo ese proceso me dolía, pero fue liberador.
No tienes por qué intentar convencer a los demás de tu punto de vista. Recuerda que cada persona tiene su vida y sus circunstancias.
En realidad sí puedes intentar evangelizar a todo el mundo, pero eso te convertirá en una persona conflictiva y tendrás bastantes discusiones por el camino.
El autoconocimiento no es lo que crees
Imagino que, si me lees, estás en el mundillo del desarrollo personal, así que es fácil que caigas en la tentación de pensar que ya te conoces suficiente.
Yo me dedico a divulgar y a escribir sobre esto porque mi misión va por ahí, pero no te voy a engañar: este es un camino lleno de oscuridad, sombra e incertidumbre.
Esa es la letra pequeña de la que poca gente habla.
Si crees que ya te conoces lo suficiente, créeme que no has entendido nada.
Cada día tienes delante de ti oportunidades para hacer conscientes tus sombras (lo más difícil), y luego poco a poco desapegarte de ellas.
Lo que no haces consciente se manifiesta en tu vida como destino, que diría el amigo Jung.
Lo que no haces consciente se manifiesta en tu vida como destino - Carl Jung Clic para tuitearVamos, que si huyes de tu sombra te perseguirá, pero si la haces consciente menguará.
Por ejemplo, si crees que tu padre es un arrogante y tienes conflicto con él, probablemente hay una parte arrogante de ti que no estás aceptando (tu sombra).
La única manera de aceptar esa sombra sería hacerla consciente. En ese sentido, tu padre es un «maestro espiritual» ya que te muestra algo inconsciente sobre ti.
Sí, no hace falta que te vayas a la India o a Tailandia, los maestros los tienes en casa.
A veces puedes descubrir algo o alguien que te cambia la vida: quizá el coaching, el yoga, la PNL… Lo que sea.
El caso es que en el fondo no dejan de ser herramientas que, si las utilizas sólo con la mente (enamorándote y apegándote a ellas), no sirven de nada.
Te pongo mi ejemplo para que lo veas más claro.
En el eneagrama de la personalidad soy un eneatipo 6 (el inseguro/leal/valiente), y lo sé porque mi vida ha sido una constante entre seguir el camino marcado por otros o atreverme a romper con lo establecido.
Algunas decisiones catárticas que he tomado son:
- Irme a estudiar y trabajar a Alemania sin hablar apenas inglés ni alemán
- Viajar en solitario con una mochila por el mundo
- Crear este blog donde compartir mis experiencias vitales
Ya me fui de viaje solo, creé mi propio proyecto, etc., por lo que podría justificar mi inseguridad en situaciones cotidianas porque soy eneatipo 6, de naturaleza dudosa.
Ahí estaría cayendo en la trampa de mi propio lado oscuro, ya que me estaría identificando y excusando con mi eneatipo.
Por lo tanto, estaría entrando en juego el ego espiritual, el más sutil de todos.
Incluso al hablar sobre estos temas con los demás hay que entender que habrá personas a las que no les interese nada el desarrollo personal, pero no hay que juzgarlas por ello.
Por otro lado, hay una línea muy delgada que separa el vacío interior y la espiritualidad del dogmatismo, ya que hay muchas personas que tienen una fuerte inclinación por soluciones mágicas.
Hay una línea muy fina que separa el vacío interior y la espiritualidad del dogmatismo, ya que muchas personas tienen una fuerte inclinación por soluciones mágicas. Clic para tuitearSobretodo cuando hay una crisis de sentido por medio.
Lo digo porque he conocido personas que decían «todos deberían usar el coaching» o «todo el mundo debería probar la ayahuasca».
El caso es que la sensación de vacío interior no es fácil de superar por varios motivos:
- Cada persona es un mundo (o un universo)
- No existe un método definitivo o una única solución
- Para casos extremos los antidepresivos pueden servir a corto plazo pero no a largo
Incluso hay personas que después de años sufriendo acaban suicidándose.
De hecho, el número de suicidios ya duplica a los muertos por accidente de tráfico en España.
Son datos fríos que ni siquiera verás en las noticias, porque la realidad es dura.
Habrá que ir a la raíz del problema, ¿no?
La auténtica espiritualidad requiere soltar lastre
¿Alguna vez te topaste con alguien que te intentó convencer de sus ideales políticos? Pues con la espiritualidad puede pasar lo mismo.
Repito lo que ya dije antes: la espiritualidad no es sinónimo de religión o de «new age», sino que significa conocerse a uno mismo en profundidad y vivir de forma consciente, respetando a los demás.
La espiritualidad significa conocerse y vivir de forma consciente, respetando a los demás. Clic para tuitearOjo, eso no significa que no puedas utilizar herramientas, ¡por supuesto que puedes!, pero debes saber que este viaje requiere de autoindagación y cuestionamiento constante.
Normalmente, las personas sólo hacemos revisión de nuestra vida cuando sufrimos mucho.
En otras palabras: normalmente necesitamos quedarnos casi sin amigos, que nos deje la pareja o que se muera alguien cercano para empezar a cuestionar nuestra forma de ver la vida.
Normalmente necesitamos quedarnos casi sin amigos, que nos deje la pareja o que se muera alguien cercano para empezar a cuestionar nuestra forma de ver la vida. Clic para tuitearSi has atravesado algo así alguna vez, ya sabes a lo que me refiero.
Cuando hablo de soltar lastre me refiero a dejar atrás el dogmatismo, es decir que tampoco serás mejor persona si:
- Comes vegano
- Te levantas a las 6 para meditar
- Haces yoga
Si te crees mejor que otros por eso, estarías entrando en ese dogma.
Además, las personas que estamos «despertando» tendemos a pasar mucho tiempo en soledad.
Pasar tiempo solo es necesario, pero también debes exponerte a situaciones fuera de tu zona de comodidad.
Lo has escuchado una y mil veces. Tu zona de comodidad es eso que haces cada día y con lo que te sientes cómodo.
Quizá te conviene apuntarte a actividades que te despierten curiosidad o te atraigan.
Puede ser teatro, yoga, canto, crossfit…
Debe ser algo que te haga salir de lo conocido para que empieces a verte en perspectiva, crear nuevas conexiones neuronales y sentirte más vivo.
También puedes implementar un ritual matutino, algo que si lo haces de forma constante te ayudará a tener más confianza.
Toma tus propias decisiones porque nadie las puede tomar por ti.
Desarrolla tus habilidades sociales y comunica tu verdad
Como decía el filósofo Zygmunt Bauman: «somos seres solitarios en contacto permanente».
Somos seres solitarios en contacto permanente - Zygmunt Bauman Clic para tuitearEsta frase viene a resumir el desafío al que nos enfrentamos en el siglo XXI.
Con el boom de las nuevas tecnologías y las redes sociales, pasamos más tiempo delante de una pantalla que conversando con personas.
Como apenas hay comunicación, la sensación de vacío interior está más presente que nunca.
En ese sentido hay dos habilidades sociales clave: la honestidad y la asertividad.
Si eres honesto contigo mismo, empezarás a ser más consciente tus emociones y de qué necesitas en cada momento. Para ello la meditación es una gran aliada.
Eso sí, también debes ser honesto con los demás para cultivar relaciones auténticas.
De hecho, ahí también es importante que trabajes la asertividad. Es decir, que te atrevas a expresar tus derechos y opiniones sin herir a la otra persona (punto medio entre agresividad y pasividad).
Si trabajas esas dos habilidades sociales clave, empezarás poco a poco a comunicar tu verdad.
Sin darte cuenta conectarás con personas que vibren en la misma frecuencia que tú.
Recuerda siempre ser consciente de cómo te relacionas contigo mismo y con los demás. Aquí la clave es la consciencia.
Por ejemplo, si te juzgas o juzgas a algunas personas, puedes empezar a darte cuenta de ello para decidir qué hacer con ese juicio.
Una herramienta muy potente para ello es el diario.
Pregúntate: ¿es cierto lo que pienso o digo? ¿Eso me sirve de algo o me perjudica?
Conclusión: respeta tu proceso y el de los demás
El camino de la autoindagación es largo pero no importa donde estés, siempre puedes volver a la consciencia del momento presente.
A veces puedes sentir que la gente de tu alrededor no te entiende, pero cada instante te está dando lo que necesitas, incluso cuando tienes emociones «negativas» y piensas que la vida es una mierda.
Lo malo (y lo bueno) que ves en los demás suele ser un fiel reflejo de lo que debes trabajar a nivel personal.
En mi caso, he tenido muchos referentes a lo largo de mi vida, y a veces hacía lo que veía de ellos o me decían porque creía que eso me iba a funcionar.
No era así en la mayoría de casos.
Cuando idolatraba a mis referentes en realidad era mi inseguridad que se disfrazada.
Es más, durante muchos años me sentí atraído por la idea de que enteógenos como la psilocibina eran lo único que me ayudaría a aliviar esa sensación de vacío.
Más allá de que sean polémicos o estén prohibidos en occidente, algunos dicen que fue el detonante para nuestro salto evolutivo hace miles de años.
No soy un gran explorador psicodélico, pero en mis experiencias tuve algunas de las revelaciones más profundas de mi vida.
De todas formas, como comentaba antes nada ni nadie puede darte las respuestas.
Habrán factores externos que te ayuden en tu camino, pero no puedes depender de ellos toda tu vida.
La única manera de llegar a esas respuestas es a través de tu propia experiencia personal, conectando con tu esencia y soltando lastres. Para ello te recomiendo la meditación y el diario emocional.
Con esto no me refiero sólo a dejar ir bienes materiales y personas que no te sirven, sino también tu condicionamiento social, cultural y familiar poco a poco.
No necesitas dejarlo todo, si no ser más consciente de qué es esencial en tu vida y qué no.
De esa forma, será mucho más fácil anclarte en la presencia.
La espiritualidad sí puede llenarte siempre y cuando sea algo que lleves de forma consciente y no dogmática.
La sabiduría nace si respetas tu propio proceso y el que están viviendo las personas a tu alrededor.
********************
¿Vives o has vivido esa sensación de vacío interior? ¿Qué hiciste para solucionarla? ¡Cuéntamelo en los comentarios!
Tu post me ha resonado muchísimo en este momento de mi vida. Si, claro que he sentido el vacío. Y lo he intentado llenar con todo lo que tú dices. Y me he sentido exactamente de la misma forma: «Si ya lo he hecho todo, hasta cuando va a volver esta mierda?» Y hasta ahora no se me había ocurrido «dejarlo sentir» igual que el resto de las emociones: tristeza, odio, ansiedad, desesperación… No mirarlo como al enemigo, sino «amar mi sombra». Viví un proceso gestáltico en el que lo tomaba como «vacío fértil» que decía Fritz Perls, pero pensaba que era una etapa, que «debía» pasar, y cuando vuelve me desespero… Gracias por esta herramienta nueva que me has dado. Estoy atravesando una especie de «salida» del ego espiritual. Dándome cuenta de que mi carácter no es zen, que puedo meditar de vez en cuando pero que me cuesta un huevo hacerlo, que la cabra tira al monte y que no puedo volverme del revés como un calcetín. Aceptándome. Gracias otra vez, en serio.
Hola María,
Gracias a ti por tus palabras, me alegra que el artículo te haya resonado! 🙂
El vacío interior es quizá lo mejor que te puede pasar, ya que si no usas parches, te obliga a sentir las emociones que afloran. Te gusten o no, ahí están.
Cuando te permites sentir esas emociones, vas adquiriendo más consciencia y, por lo tanto, iluminando esas sombras.
Al final todos los que estamos en este viaje tenemos «recaídas» y sé que es doloroso, pero necesitamos mucha comprensión y aceptación, como dices.
Mucho ánimo en tu proceso María, un abrazo!
Claro q he sentido el vacío!
Sentí el vacío cuando dejé a mi novio de toda la vida, sentí el vacío cuando atravesé una bulimia feroz, sentí el vacío cuando me divorcié, sentí el vacío cuando después del viaje de mi vida me di cuenta q a la vuelta había q construir de cero.
Siento el vacío cada día cuando me siento delante del ordenador y me tengo q recordar continuamente cuál es mi propósito para no desfallecer.
Bendito vacío q nos permite limpiar nuestras vidas.
Y si, yo también he sentido en ese camino de autoconocimiento q era más especial q los demás. Todo el mundo estaba equivocado y yo no paraba de encontrar respuestas.
Hasta q te das cuenta de q son las tuyas, de q tus respuestas no le sirven a todo el mundo, y q aquel q necesita dormir muchas horas no es feliz levantándose a las 6 para meditar.
Gracias porque estoy segura de q este articulo inspirará a mucha gente.
Un abrazo Edu
Hola Tania,
Me alegra que tú también te hayas dado cuenta!
No es fácil, pero hay que ser conscientes de que da igual cómo de «despierto» estés. Cada persona está en su propio proceso y viviendo su propia vida, ni mejor ni peor que la tuya.
De todas formas, todos tenemos ego y no pasa nada si caemos en la arrogancia, porque podemos ponerle consciencia.
Creo que disfrutar de cada paso que des (por incómodo o difícil que sea) es más importante que recordarte el propósito continuamente (algo que, desde mi experiencia, puede generar mucha frustración).
Un abrazo Tania y gracias a ti!
¡Hola Edu!
Me ha gustado el post, es, como siempre, sincero y profundo.
Sólo resaltar dos cosas que ya has dicho de una forma u otra.
La primera, que lo más importante es conectar con tu verdadera Esencia para saber qué es lo que realmente eres y, por consiguiente, qué buscas y qué quieres/necesitas.
La segunda, ser sincero con dicha Esencia y respetar lo que ésta nos dicta y, por tanto, el camino de cada cual. Los vacíos se dan porque la traicionamos continuamente y no le hacemos maldito caso. Si , en el fondo, eres un materialista , no intentes buscar tu camino en la espiritualidad, que también se está volviendo algo comercial. Si realmente eres un ser de naturaleza espiritual, jamás te sentirás pleno en una sociedad materialista/consumista y deberás seguir tu camino por otros lares…
En fin, repito lo obvio, pero, siempre es bueno tener claras ciertas cosas. Para mí, son estas dos. Y aunque son fáciles de decir, no lo son tanto a la hora de poner a la práctica…
¡Un abrazo, crack!
Hola Ubay,
Gracias por tus palabras y por pasarte por aquí!
A veces, dependiendo de las circunstancias, no es fácil hacer lo que comentas.
De ahí que siga habiendo tanto conflicto en el mundo (como el que estamos viviendo ahora a nivel político).
Creo que al final todo conflicto (individual o colectivo) nace por identificarse con una idea, un grupo o un punto de vista.
Como dices, es fundamental conectar con nuestra esencia y respetarla para no sentir ese vacío. Me encantó el ejemplo que usaste de ser materialista o no jajaj 😀
Al final siempre digo lo mismo: hay que conocerse bien y encontrar el equilibrio físico, mental y espiritual (lo que sea que eso signifique para ti).
Un abrazo enorme!
Hola Edu. Me encanta tu post y como hablas de forma tan autentica y sencilla. Yo creo que autoconocimiento es una de las aplicaciones mas poderosas de crecimiento personal. Para mi ha sido la clave descubrir que ser coherente con tu interior es tan crucial, siendo de verdad honesto y aprender a enseñar tu lado vulnerable. Porque no siendo asi, me infermaba. En mi enfacia y edad adulta parece que pasaba mas tiempo con resfriados y otras enfermedades que sana y vital. Estaba buscando aceptacion de los demas y atencion, amor de los demas. Siempre me intereso el mundo de psicologia y misterio de nuestra mente y creo que somos una union de cuerpo, mente y alma, unos seres holisticos. Estoy haciendo mi camino de crecimiento personal y creo que es lo mejor que me pudiera haber pasado despues que años que no me sentia feliz en ninguno de muchos trabajos que tenia. Habia muchos estudios y muchos libros y blogs leidos de coaching, eneagrama, yoga, mindfulness. Creo que cada uno tiene que encontrar su propio camino alineado con su esencia. Estoy muy de acuerdo no hay que convertir a nadie, todos somos libres de vivir desde nuestras propias creencias y decisiones siempre cuando no dañan nuestro bienestar y de los demas. Muchas gracias por tus aportaciones. Ya te seguia hace tiempo pero nunca me atrevia a comentar. En este articulo has podido llegar al punto de dolor mio, que estoy sanando desde hace tiempo y cada vez compartiendo mas mis experiencias con los demas. Un abrazo y gracias otra vez…
Hola Elena,
En primer lugar muchas gracias por tus palabras!
Bajo mi punto de vista, es absurdo contemplar el desarrollo personal sin autoconocimiento.
Si por ejemplo quieres que tu coche corra más, necesitas saber algo de mecánica antes de abrir el capó y ponerte a tocar piezas.
Pues con las personas pasa lo mismo.
Krishnamurti decía (y estoy bastante de acuerdo) que no necesitas cambiar nada, porque aquello que vas conociendo poco a poco se irá sometiendo a una profunda transformación.
En otras palabras, «sucede» sin querer cambiar.
Un abrazo Elena y gracias otra vez a ti por compartir 🙂
Hola Edu!
Muchas gracias por compartir semejante artículo. Se nota que le has dedicado tiempo y reflexión.
Me he quedado con muchas ideas, pero me gustaría ahondar en éstas:
-«los maestros los tienes en casa». Qué cierto es compañero. No hace falta irse de viaje al Tíbet para darte cuenta de aquello que todavía no has aceptado. Creo que esa es la palabra clave: aceptación.
– «el número de suicidios ya duplica a los muertos por accidente de tráfico en España.» Es un dato que me ha dejado atónito. No tenía ni idea de ello (aun sabiendo que era un índice alto).
– leyéndote me ha venido a la cabeza una frase que dice nuestro amigo Borja Vilaseca en su super libro «El Principito se pone la corbata» (si no lo has leído te lo recomiendo 100%. Es uno de mis preferidos). Borja comenta que «a veces para aprender hace falta desaprender». No puedo estar más de acuerdo y parece que tú también.
– en términos generales, al leer tu post me ha venido a la cabeza el libro Siddharta y la diferencia entre conocimiento y sabiduría. Como bien dices, el desarrollo personal, el autoconocimiento o la espiritualidad no va tanto de recabar conocimiento o técnicas (que están muy bien y son necesarias) como de experimentar y trabajar tu persona diariamente, lo que se llama sabiduría.
Espero que después de leer este post, hayas ayudado a más personas a tener las cosas más claras y a empezar a encontrarse con su verdad, que es la única que en realidad importa.
Un fuerte abrazo crack!
Hola Miguel Ángel,
Me alegra mucho que te guste el artículo!
Efectivamente me llevó tiempo de reflexionar sobre el tema, porque a veces se aborda de forma poco profunda y caemos en dinámicas egoicas parecidas a las «terrenales».
No he leído Siddharta pero es un libro que llevo tiempo con ganas de leer porque no eres la primera persona que me lo recomienda. Ah, y Borja es un genio!
Un abrazo y gracias por tu comentario.
Hola Edu,
Aprovecho para desearte suerte con tus proyectos personales y profesionales de 2019.
¡Otro abrazo para ti!
Ah, y el libro de Siddharta tiene unas 40 páginas. Es una sabiduría en forma de historia corta que bien merece ser leída 🙂
Yo desde jovencita he sentido ese vacío, incluso episodios de depresión, sólo que en silencio. Ahora que mi madre falleció hace 5 meses después de un año luchando contra un cáncer, ha vuelto la sensación pero a lo bestia, hasta tal punto de replantearme mi vida al completo, y necesitar leer sobre la espiritualidad a la desesperada, sorprendiéndome al descubrir cosas sobre este tema, pero la verdad que sigo muy perdida, intento no aplicar ningún parche como dices, ojalá consiga sentirme mejor o evolucionar….
Hola María,
Lamento mucho tu pérdida, espero que poco a poco hayas ido recuperando el ánimo y encontrando la paz interior que en el fondo todos necesitamos.
Como comentas, cuando leemos sobre un tema que no conocemos empezamos a descubrir aspectos de nosotros mismos. En este caso la espiritualidad puede haberte dado una nueva perspectiva sobre la vida hasta entonces desconocida.
Apóyate en tu entorno para no sentirte perdida, y de todas formas recuerda que lo trascendental no se puede tocar, pero sí sentir. Poco a poco irás encontranto la forma (personas, actividades, etc.) de sentirte mejor.
Un abrazo y mucho ánimo.
Hola Edu
En estos momentos de mi vida me encontre con tu blog, estos dias han sido extraños con la busqueda de algo que llene ese vació, con tus palabras siento que estamos en un proceso de cambio en el que es importante reconocer lo que sentimos y ser conscientes de la profundidad de todo.
He buscado y reflexionado que es lo que podría ser para mi, una religión, un guía, un viaje largo, pero siento que la prueba es sacarle lo máximo al presente, gracias por los mensajes, porque me senti identificada con varias de tus experiencias, es increíble como siendo de diversos lugares, el ser siempre esta conectado y en evolución.
Estoy consciente del crecimiento que implican muchas experiencias aunque a veces no sea el camino más fácil, me gustaría preguntarte, ¿como es que aceptas el proceso y fluyes?
Me he visto en varias experiencias de vació y siento que hay algo más que no alcanzó a discernir, a captar, gracias nuevamente, te mando muchos saludos.
Hola Gaby,
En primer lugar gracias por compartir tus impresiones. Todo lo externo puede servirnos durante un tiempo como referencia, pero no para siempre.
Para mí, entender que todo es un proceso y que encontrar esa paz interior puede llevar meses o años fue lo más importante.
Trabajé cuidadosamente mis hábitos de almentación, descanso y ejercicio físico (sobretodo este último), complementándolos con meditación, lecturas, podcast y vídeos que resuenen conmigo y me ayuden a cristalizar mis ideas y reflexiones.
Aunque mi forma de aceptar el proceso y fluir es la que yo he descubierto con el paso del tiempo, no es LA forma.
Estoy seguro de que, con tus experiencia de vida, ya tienes la sabiduría necesaria para trabajar esa aceptación y ese fluir que anhelas. Sólo necesitas darte cuenta e implementar los ajustes que consideres necesarios.
Un fuerte abrazo Gaby!
Hola. Acaba de llegar a mis manos tu articulo. Me vibra muchisimo pq estoy viviendo desde hace mucho ese vacio q describes, solo que yo soy incapaz de conectar ni conectarme a nada, a ninguna herramienta ni externa ni interna para salir de este vacio gelido q se ha instalado en mi vida. Me siento incapaz de nada. Mi voluntad se ha eafumado. Me siento profundamente cansada. Parece cm si estuviese viviendo una vida q no me pertenece. Apenas si consigo decir » Dios mio ayudame». Nada cambia. Nada sucede haga lo q haga. Todo lo que me rodea me entristece y me causa un profundo dolor(las disarmonias entre mis hermanos, el duro proceso q afronta mi hija adolescente, mi situacion de desempleo, la ruptura con mi pareja, lo q sucede en el mundo en gral me apena muchisimo). Solo quiero q td termine, estoy cansada de esta densidad. No quiero vivir bajo estos yugos y no consigo cambiarlos, ni encuentro el modo de motivarme. Siento q mi vida empezaria a «estar mejor» si la abundancia llegara pq desde ahi conseguiria acceder a td lo q me motiva y empodera. Me siento olvidada y abandonada por Dios/Fuente/Universo aunque x otro lado se q no es asi, o al menos, eso es lo q quiero creer. Tds me dicen q medite, me ponga musica relajante, etc etc etc., pero, td eso ya lo he hecho, llevo años haciendolo y, td sigue igual……asi que, ahora, lo he abandonado todo, me he abandonado a mi misma, creo q simplemente me he rendido a mi sombra…..Muchas gracias. Saludos. Alicia.
Hola Alicia,
En primer lugar gracias por compartir parte de tu historia.
Lo que cuento en el artículo y lo que te voy a decir es fruto de mi experiencia personal, nada más.
Bajo mi punto de vista, aunque la vida es dura y puede llegar incluso a ser trágica dependiendo de tus circunstancias, crear las condiciones necesarias para prosperar dependen sobretodo de uno mismo.
En primer lugar, es muy importante cultivar la energía vital. Porque sin energía, tu estado de ánimo seguirá bajo y no podrás enfrentar el día a día con confianza.
Te recomiendo leer el artículo que escribí sobre la energía vital para poner en práctica varios recursos fáciles y rápidos que siempre tenemos a nuestro alcance.
Ese debe ser el punto de partida desde el que te muevas, no otro.
Mucho ánimo Alicia, te mando un fuerte abrazo!
Hola Alicia, te escribo para mandarte mucho ánimo. No se en que momento vital estás ahora, después de seis meses, espero que un poquito mejor. Entiendo lo que dices, eso de que a veces parece que Dios se ha olvidado de nosotros. Si te sirve de algo, Jesús decía que no desfallezcamos en nuestras oraciones. Él está ahí siempre, pero nosotros, pienso yo que en nuestra tristeza y desazón no somos capaces de acercarnos a Él, por vergüenza, por sentimientos de culpa, por falta de Fé, por mil cosas. El caso es que Jesús no vino al mundo a buscar a los “justos”, si no a los que estamos perdidos, y eso es una preciosa esperanza. Él dijo “Dichosos los que lloran porque ellos serán consolados”…..Yo aún espero ese consuelo, y confío en que también te llegue pronto a ti. Un abrazo muy, muy fuerte. Cuidate!!
Hola Edu,
Muchísimas gracias por compartir tu experiencia. Me has hecho mucho bien. Pienso que es de lo mejor que he leído, hasta ahora, a este respecto.
Yo siento el vacío desde que era niña. Yo lo llamo falta de conexión verdadera con Dios, con mi esencia, con quien soy de verdad, falta de Amor, falta de un puerto hacia el que dirigirse….
Tengo 48 años, y llevo perdida la mayor parte de mi existencia en la Tierra.
Hace 5 meses que dejé (ya es la segunda vez) un trabajo. Estoy en paro, y sin cobrar ninguna prestación, viviendo de los ahorros que he guardado con obsesión para cuando llegase este momento de nuevo.
He dejado dos trabajos esperando “encontrarme”, saber por qué tenía tanta ansiedad, estrés, angustia vital, cansancio, ninguna gana de levantarme por la mañanas, un terror atroz a la sociedad y a la vida, y ganas de no hacer nada. He dejado dos trabajos cansada de compararme con los demás, de ver como la gente “fluía”, disfrutaba de la vida (aparentemente) sin preocupaciones, y aceptando a todos, y todo lo que les llegaba. Y en cambio yo, no podía fluir, todo me molestaba, todo lo analizaba, trabajaba dándolo todo para obtener el reconocimiento de los demás, o mi propio reconocimiento, que era lo único que me mantenía un poco a flote (puro narcisismo….).
Nunca he tenido claro que quería hacer en la vida. Siempre he estado más pendiente de lo que pudiesen decir los demás de mí, de ocupar un lugar en la sociedad, de ser alguien “normal”……Pero yo no me sentía normal: No estoy de acuerdo en como funcionan las cosas, lo critico todo, y siempre anhelo apartarme del “mundanal ruido” hacia lugares más tranquilos.
Estoy muy perdida, pero ayer buscando en Internet “¿Cómo salir de la depresión?”, encontré tu web. He seguido enlaces a otras páginas que dejas a lo largo del texto, y he leído otras entradas, y, de verdad, ha sido una enorme alegría. Me has traído un poquito más de Luz en el camino, y Esperanza.
Te deseo lo mejor, y que Dios te guarde. ¡¡¡¡ Gracias !!!
Hola María,
En primer lugar me alegra que te te haya hecho bien leer el blog!
Por otro lado, lo ideal sería que el tema de la depresión lo trataras con un profesional de la salud para que te pueda orientar a nivel personal y emocional.
En cualquier caso, veo que es posible que tengas el rasgo de la personalidad PAS (Persona Altamente Sensible). A los que tenemos ese rasgo por lo general nos cuesta más de lo normal encajar y vivir sin estrés. Te animo a que investigues sobre ello, espero que te sirva.
Un abrazo y mucho ánimo.
Muchísimas gracias por tus consejos Edu: Si, soy una Persona Altamente Sensible, demasiado diría yo. Todo me afecta muchísimo. Y. si, tal vez sea el moneto de que alguien me diga si por lo que llevo pasando tiempo ya es una depresión. Nunca he ico al psicólogo por esta causa, aunque si por otros temas (ruptura de relación). Desde que entré en la adolescencia me cuesta tener un motivo para levantarme por la mañanas. Hace unos cuantos años descubrí la Homeopatía, el Shiatsu, las Flores de Bach….y es con estas terapias (y con la enorme ayuda de «El de arriba») con las que voy un poco saliendo hacia adelante.
Un millón de gracias de nuevo.
Hola Edu,
La verdad es que me parece interesante que compartas con los demás tu camino y que en este mundo que vivimos seas capaz de hablar de espiritualidad.
Al fin y al cabo creo que como seres humanos buscamos un sentido trascendente a nuestra vida, no todo puede acabar en morir y ya.
En mi opinión esa semilla que está en nuestro corazón es la prueba más fehaciente de que hay algo más, de que formamos parte de algo superior a nosotros, pero que a la vez está en nosotros, en ti y en mi a la vez, por lo que todos en cierto modo también somos uno.
En última instancia todos buscamos ese sentido de nuestra vida, que creo que se puede resumir en darnos. Darnos tal y como somos cada uno, dar lo mejor que tenemos al mundo. Llegar a nuestro máximo potencial pero no por nosotros, sino porque es lo que el mundo espera de cada uno.
En algunos casos incluso lo que espera de nosotros el mundo es el ejemplo de que las dificultades o el mal no pueden robarnos la libertad de elegir nuestra actitud, el sentido de nuestra vida.
En mi caso me impactó mucho y me hizo reflexionar enormemente el libro de Viktor Frankl «El hombre en busca del sentido».
Muchas gracias por tomarte el tiempo de escribir esta entrada, seguro que hace reflexionar a muchas personas.
Un saludo!
Fernando V.
Gracias por tus palabras Fernando!
Es un tema interesante el que planteas, y estoy de acuerdo en que buscar esa trascendencia es inherente a la vida.
Lo podemos hacer de forma consciente o inconsciente a través de crear proyectos o tener descendencia, por ejemplo.
A partir de ahí se abre un debate entorno a la forma subjetiva de entender y conceptualizar esa búsqueda, lo que hace el tema aún más interesante 🙂
Un abrazo!
Hola Edu, ¡Interesantísimo artículo!
Mi respuesta al título del artículo «¿Puede la espiritualidad llenar tu vacío interior? Es un rotundo sí.
Lo que me gustaría plantear es ¿Debe la espiritualidad llenar tu vacío interior?
Al igual que tu, con el libro del chamanismo, yo también me he asustado de ver como puedes modificar tu pensamiento con este tipo de dogmatismo.
Antes de expresar mi opinión me gustaría decir que, obviamente cada persona es libre de sentir lo que quiera. También que nuestras emociones, en algunos casos, pueden hacer que padezcamos algún tipo de enfermedad; al igual que por ejemplo la ansiedad nos da señales de que hay determinadas cosas que no estamos haciendo bien. Por otra parte, también considero que meditar, yoga e incluso alguna nuevas técnicas de moda como el «mindfulness» te ayudar a conectar con tu interior muchas veces necesario para nuestro crecimiento personal.
Pero como el articulo trata sobre espiritualidad y vacío interior me gustaría centrarme en el tema y poder transmitir mi humilde opinión bajo mi propia experiencia.
Para mí el creerse espiritual es una huida de sí mismo. En muchos casos no se es capaz de afrontar la vida tal y como viene y el individuo se crea un estado espiritual de conciencia en el que justificarse. Así dejas de pelear por los propios deseos terrenales y te centras en todo un mundo espiritual con auto-engaños. Para mi son sugestiones y no hay nada demostrable.
De esta manera tu mundo se convierte en una búsqueda espiritual de por vida, con infinitos niveles de espiritualidad que van desde concentrarse en tu propia energía o practicar Reiki hasta llegar incluso a visionar que cuerpos terrenales ha ocupado tu alma en otras vidas. Y por supuesto, habrá algunos «gurus o guías espirituales» que sepan aprovecharse de ello, bien sea por que ellos mismos vivan en un auto-engaño, o bien sea por que son unos farsantes y solo quieren un beneficio económico.
Y yo planteo lo siguiente, si tu mente es capaz de sugestionarse con 2 horas de visionado de una película de miedo y justo después escuchar ruidos o creer incluso que hay fantasmas en tu casa, como no va a sugestionarse después de montones de días de meditación, innumerables horas de lectura e incluso charlas de algún «gurú» enseñando lo que supuestamente debes sentir. Después de todo esto sientes energías, sincronicidad, y todo lo que te hayan o tú mismo te hayas auto-engañado a creer.
Desde mi punto de vista la espiritualidad es como una adicción sin sustancia en la que la persona tiende, tanto a huir de su realidad, como de perseguir sus objetivos terrenales en la vida.
No hay nada de malo en creerse espiritual, al final, es algo que te focaliza en conseguir una meta, ya sea sentir el Chakra corazón o incluso el mismísimo Kundalini. Cuando persigues una meta, esta te lleva a luchar, lo que incita a tu mente a creer que está en un estado de realización espiritual y por lo tanto manda señales a tu cuerpo de que todo está bien, con lo que tu cuerpo evitaría todo tipo de enfermedades relaciones con la infelicidad por no poder pelear por un objetivo.
Está relativamente bien llegar a pensar así, pues tú mismo vas a encontrarte mejor al tener objetivos en tu vida y no ser una “alma” en pena que vive acobardado por no haber conseguido sus propios sueños o lamentándose por la triste vida que ha tenido antes de encontrar el “camino de la espiritualidad”.
Hace tiempo leí una frase que decía: “Que tus sueños sean más grandes que tus miedos”, la pena es que en este caso tu sueño es solamente eso, una suposición que no podrás llegar a refutar en esta vida. Es una manera (fácil o incluso muy difícil) de tener una vida con sentido, un sentido espiritual que más bien le debería ser correspondido experimentar a tu espíritu y no a tu cuerpo-mente.
Tanto la espiritualidad como la ausencia de ella no es un dogma y cada persona puede tener su propia opinión y su propia experiencia.
Hola Daniel,
Aunque matizaría algunos puntos, la tuya es una reflexión bastante necesaria así que gracias por compartirla!
Es cierto que bastantes personas que se consideran espirituales encuentran explicaciones a sus conflictos personales en alguna «herramienta espiritual», cual píldora mágica.
Eso muchas veces no es más que un sesgo de confirmación del que es difícil librarse.
De hecho, conocer tus sesgos no te libera de ellos, porque a veces son automáticos e inconscientes.
Lo que quiero decir con esto es que los mecanismos de la mente son muy sutiles, y es complicado (o imposible) tener una visión 100% objetiva de la realidad, de ahí que haya personas que se apeguen a una identidad espiritual, materialista o de otra índole.
De todas formas, para mí es fundamental primero de todo cultivar hábitos saludables de alimentación, movimiento, conexión social y descanso.
Sólo con eso la mayoría de las enfermedades modernas (físicas y mentales) desaparecerían, pero eso no significa que debas cerrar la puerta a herramientas alternativas para tratar un tema concreto de tu vida.
El escepticismo auténtico consiste en no creerse nada pero aún y así estar abierto a otras perspectivas y cosmovisiones.
Hasta aquí mis matices, aunque estoy bastante de acuerdo con tu reflexión.
Un abrazo!